Ha sido un año movido para la gente de TikTok Estados Unidos, que ha debido navegar entre la incertidumbre de no saber qué pasaría finalmente con el futuro de una app que ha estado marcado por la polémica, las decisiones políticas y las crecientes tensiones bilaterales entre China y Estados Unidos. Como si de una partida de tenis de mesa de la guerra fría se tratase, los gobiernos y, claro, grupos empresariales de ambos países, han estado pelotando sin cesar hasta llegar al punto final que acaban de alcanzar.
Y entre los ganadores está uno de los nombres que más habían sonado durante todo este tiempo: Oracle.
Un nuevo nombre para una nueva etapa: TikTok USDS Joint Venture LLC
Tras un año marcado por la incertidumbre legal, la intervención directa de la Casa Blanca y un breve pero traumático “apagón” nacional allá por el mes de enero, el futuro de TikTok en Estados Unidos finalmente tiene nombre y apellido: TikTok USDS Joint Venture LLC.
Ayer jueves, a través de un memorándum interno enviado por el CEO Shou Zi Chew, la compañía confirmó la firma de los acuerdos definitivos que transformarán la red social en una entidad controlada mayoritariamente por capital estadounidense y global, alejándola del control directo de ByteDance y esquivando la prohibición definitiva que parecía inevitable hace apenas una vez meses.
Un acuerdo bajo presión
Como decíamos el nacimiento de esta nueva empresa no es solo comercial, sino que tiene unas raíces profundamente políticas. El acuerdo es la culminación de la ley de desinversión firmada por Joe Biden en 2024, que obligaba a ByteDance a vender sus operaciones en EE.UU. ante preocupaciones relativas a la seguridad nacional. Aunque la Corte Suprema ratificó la medida en enero de 2025 provocando que la app fuera retirada de las tiendas de aplicaciones durante unas horas, la llegada de Donald Trump a la presidencia cambió el guion.
A través de una serie de órdenes ejecutivas y prórrogas que mantuvieron la aplicación en un “limbo operativo”, la administración Trump encaminó a la empresa a una negociación que hoy se traduce en una valoración del negocio estadounidense de la red social en 14.000 millones de dólares .
Vale, pero ¿quién manda ahora en TikTok Estados Unidos?
La estructura de propiedad de TikTok USDS Joint Venture LLC ha sido diseñada para cumplir con el límite del 20% de influencia extranjera “adversaria”. Desde 2024 ley estadounidense establece que cualquier aplicación de importancia crítica (como TikTok) no puede estar bajo el control de una entidad de países considerados “adversarios”, como es el caso de China. Para la justicia de EE.UU. , el control no solo es tener el 51% de las acciones, sino tener la capacidad de dictar decisiones.
De esta forma, la nueva sociedad tendrá la siguiente estructura:
- El nuevo consorcio (45%): Los tres grandes protagonistas son Oracle (liderada por Larry Ellison), la firma de capital privado Silver Lake y el fondo MGX de Abu Dabi. Cada uno posee un 15% de la nueva entidad.
- Inversores actuales (30,1%): Fondos de inversión globales que ya participaban en ByteDance mantienen su pedazo del pastel bajo la nueva bandera.
- ByteDance (19,9%): La matriz original china retiene una participación minoritaria, el máximo permitido por ley para evitar el veto.
- Otros (5%): El resto queda en manos de nuevos inversores minoritarios, completando el control no chino de la plataforma.
Un algoritmo bajo vigilancia
Quizás el cambio más técnico y polémico radica en el famoso, poderoso y polémico a partes iguales algoritmo de recomendación de contenidos de TikTok. Según el memorando de Chew, el famoso código de TikTok será reentrenado exclusivamente con datos de usuarios estadounidenses . El objetivo es garantizar que el feed de contenido esté “libre de manipulación externa”.
En este acuerdo, Oracle no solo pone el dinero; será el “socio de seguridad de confianza”. En la práctica, esto significa que el código de la aplicación operará en servidores de Oracle en suelo estadounidense, y la firma de Larry Ellison tendrá el derecho (y la obligación) de auditar cada línea de software para asegurar que no existan puertas traseras ni sesgos impuestos desde Pekín.
¿Qué cambia para el usuario?
A corto plazo, la respuesta es “poco”. TikTok seguirá operando con las funciones habituales (como el comercio electrónico y la publicidad), por lo que un usuario en Nueva York podrá seguir viendo anuncios de marcas globales. El acuerdo garantiza la interoperabilidad de esas funciones, así que si una persona española sube un vídeo que se hace viral, un usuario en Los Ángeles debe poder verlo. Además, y sin que la información filtrada a los medios entre en más detalles, la mención al comercio electrónico apunta a que los vendedores globales de TikTok Shop podrán vender a los estadounidenses y viceversa.
Sin embargo, la independencia de la moderación de contenidos y la gestión de datos ahora recaerá sobre una junta directiva de siete miembros, de los cuales la mayoría serán estadounidenses .
En cualquier caso, y aunque los acuerdos ya están firmados, el proceso no terminará oficialmente hasta el 22 de enero de 2026 , la fecha fijada para el cierre de la transacción. Con este movimiento, TikTok no solo sobrevive, sino que se convierte en todo un experimento de geopolítica digital: una red social de origen chino operada bajo la tutela de los gigantes del software y el capital privado de Estados Unidos.
Imagen: Gemini
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